EDUCACIÓN Y CONCIENCIA HISTÓRICA
Por Carlos Rojas Galarza(*)
Nuestro Himno Nacional, como símbolo de peruanidad y patriotismo, merece todo nuestro respeto y veneración. Como tal, es deber de todo maestro, inculcar en los alumnos el más ferviente amor a nuestro Perú, su historia y sus símbolos representativos.
Sin embargo, reflexionemos sobre algunas preguntas que nos plantean los alumnos en las aulas: ¿cómo comprender el Himno Nacional cuando el contenido de las estrofas no corresponde a la verdad histórica, ¿cómo motivar el amor al Perú a través del Himno, cuando hay una inocultable contradicción entre las estrofas y lo que realmente ocurrió en el proceso de la Independencia del Perú respecto a la dominación española?, en fin, ¿cómo contribuir a la formación de la conciencia histórica, cuando nuestra Canción Nacional, con su mensaje reduce el espíritu patriótico y beligerante de los auténticos peruanos de aquella época?
Creemos que no hay mejor amor por patrio que decir la verdad a nuestros estudiantes: una educación al servicio del pueblo plantea al maestro una interpretación científica de nuestra historia, para que nuestros discípulos estén en condiciones de reflexionar sobre el significado de nuestro Himno, y con más ahínco y vehemencia, estudiar, trabajar por un nuevo Perú. Qué mejor oportunidad para contribuir al desarrollo de la capacidad crítica y constructiva, incitando al razonamiento, acudiendo a la lógica de la historia. Por tanto, digamos algunas observaciones.
Hace algún tiempo, otra vez se volvió a la discusión entre los políticos e intelectuales de la derecha principalmente, sobre lo auténtico o apócrifo de la primera estrofa (Largo tiempo el peruano oprimido…); si se debe seguir cantando o no, la sexta estrofa (en su cima los Andes…). Con sinceridad, creemos que si bien es importante establecer la verdad en torno a la autoría de la primera estrofa, averiguando si José de la Torre Ugarte fue quien la compuso, lo fundamental a discutir es, si hay una correspondencia entre las estrofas y la realidad histórica. Precisamente el diario de los grandes monopolios y de la derecha recalcitrante, “El Comercio”, obvia esta confrontación básica, y toda su campaña sobre el Himno Nacional, que hace algunos meses realizó, estuvo centrada simplemente a lo “auténtico o apócrifo de la primera estrofa”.
Esta evasión de la discusión fundamental no es casual, pues, el estudio de la historia es en esencia un problema ideológico y político, por consiguiente hay intereses que defender.
Al analizar los contenidos de las estrofas, veremos que hay claros objetivos ideo-políticos con ingredientes racistas. Veamos.
En la primera estrofa (la llamada apócrifa) hay afirmaciones que necesitan rebatirse: “Largo tiempo (el peruano) en silencio gimió/mas apenas el grito sagrado/ la indolencia del esclavo sacude/ la humillada cerviz levantó” Con estas letras se nos quiere dar la imagen de que los peruanos, cuya inmensa mayoría era indígena, en un silencio llorón soportaban la cruel dominación española, hasta que ¡por fin! Llegaron los ejércitos patriotas del Sur. Y recién se sacudió de su indolencia el peruano. ¡ Nada más falso ! La historia no enseña que durante los tres siglos de dominación colonial, los indígenas campesinos, mineros, obrajeros, artesanos, etc., como también sectores empobrecidos de mestizos y criollos, resistieron y pelearon de varias formas. El proceso mismo de la conquista (siglo XVI fue un período de violenta resistencia al invasor, en el que destacaron Rumi Ñahui, Calcuchimac y Manco Inca. Años después de culminado el aplastamiento militar de la resistencia indígena, la lucha continuó adoptando nuevas formas como los movimientos religiosos autóctonos de Taki Onkoy y Yanahuara.
Durante todo el siglo XVII, aunque en menor grado, prosiguieron las rebeliones populares, ahogadas en sangre. Como señala Don Atilio Sivirichi fueron “movimientos esporádicos de protesta y desesperación contra los sistemas de servidumbre y esclavitud que han pasado desapercibidos para la historia, pero que demuestran que el Perú anhelaba su autonomía”.[1]
En el siglo XVIII, la protesta indígena cobro nueva dimensión y surgieron manifestaciones de grandes proporciones, llegándose a los alzamientos armados, ya no de resistencia, sino de liberación, a lo lago de más de un siglo, donde se produjeron más de cien movimientos subversivos predominantemente indígenas. Es importante anotar que estas luchas tuvieron un carácter anticolonial y en muchos casos antifeudal. Entre los movimientos revolucionarios indígenas sobresalieron los de Juan Santos Atahualpa, Tupac Amaru, Pedro Vilcapaza, etc. Queda entonces demostrado que los indígenas jamás estuvieron en silencio y mucho menos gimiendo.
La llegada de San Martín al Perú se produjo en la segunda década del siglo XIX, habiéndose encontrado un pueblo fogueado en las luchas liberadoras durante casi cien años.
En la segunda y tercera estrofas también se distorsiona la historia. Nadie le resta méritos al libertador San martín por su decisiva contribución a la gesta liberadora, pero tampoco podemos dejar de observar los ¿yerros? de estrategia militar y táctica política cometidos por el él y sus asesores. Por ejemplo, la indiferencia por los guerrilleros indígenas o montoneros que luchaban arduamente en la sierra. San Martín jamás guerreó en los andes peruanos. “Por doquier San Martín inflamado/libertad, libertad pronunció/ y meciendo su base los Andes/ la anunciaron también a una voz/”. En todo caso, precisemos que fue Álvarez de Arenales quien penetró hacia el interior del territorio andino y con el apoyo de los montoneros, obtuvo gloriosas victorias sobre los desanimados ejércitos realistas.
En las demás estrofas se dice: “Lima, cumple ese voto solemne/ y, severa, su enojo mostró,/ al tirano impotente lanzando/ que intentaba alargar su opresión/. Otra falsedad. La aristocracia criolla jamás fue patriota. Los criollos ricos limeños, beneficiados con el lazo comercial virreinal, fueron reacios a la independencia. No olvidemos que fueron precisamente los limeños fidelistas, los que financiaron todo un ejército realista, en los momentos de la llegada de San Martín al Perú. Fueron los humildes pobladores indígenas, mestizos y negros del valle del Rímac los que se plegaron al ejército libertador.
En la penúltima y última estrofas e hacen votos por mantener libre a nuestro Perú y que bajo la sombra de la bandera vivamos tranquilos. ¿Dejó de ser dependiente nuestra patria: se la mantuvo libre o inmediatamente pasamos a ser semicolonia de Inglaterra? ¿La proclamada independencia significó para el campesinado, una vida tranquila, libre y colmada de justicia? El pueblo peruano desde aquella época está comprobando, cómo los gobiernos de turno viene incumpliendo con el voto solemne de vivir libres y en paz como se señala en el Himno Nacional.Se podría continuar con más ejemplos, pero que creemos que es suficiente.
Ahora bien, se habla del respeto que se debe tener a la tradición popular. Estamos de acuerdo con ello. Siempre que no atente justamente con los intereses populares. Se argumenta que tal estrofa se ha convertido ya en tradición popular y por tanto, simple y llanamente hay que aceptarla. Si aceptáramos ello, estaríamos contribuyendo a la dominación ideológica y favoreciendo los objetivos políticos de los sectores dominantes.
Numerosos intelectuales han planteado un debate nacional en torno a este problema. La necesidad histórica lo demanda.La gran burguesía y su partido el APRA, a lo sumo atenderá la discusión en lo formal, vale decir, lo que quiere “El Comercio”. El problema de fondo, de planteamientos ideológicos e históricos, como solicitud de la conciencia colectiva popular, tendrá que ser encarado por los sectores del pueblo y los partidos de izquierda así como también por los intelectuales progresistas e instituciones democráticas. ¡He ahí un reto más!
(*) Mg. Docente de la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle La Cantuta, Chosica, Perú
gracias x haber sakado esta pagina sin ustedes no habria podido hacer mi tarea
ResponderEliminargracias
tienen que poner la segunda y tercera estrofa del hinmo nacional del peru con su mensaje ´´USEA´´ lo que quiere dacir la segunda y tercera estrofa
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